La situación de los autónomos en España ha sido objeto de debate constante en los últimos años, y uno de los temas más recurrentes ha sido el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) que deben pagar.
En este contexto, surgió el debate de la Directiva (UE) 2020/285, que permitiría que los estados miembros otorguen exenciones fiscales en relación con las entregas de bienes y los servicios. De aprobarse, podría entrar en vigor entre el 2025 y 2027.
En un nuevo post de Valio Consulting, explicaremos por qué, aunque la posibilidad de que esto ocurra es un tema de discusión, hay varias razones para considerar su viabilidad.
¿Cuáles serían las razones para que la eliminación del IVA sea o no viable?
En primer lugar, se argumenta que la exención del IVA para los autónomos podría estimular el emprendimiento y la creación de nuevos negocios. Al reducir los costos iniciales, se incentivaría a más personas a aventurarse en el mundo empresarial, lo que a su vez podría impulsar la economía y generar empleo.
Sin embargo, esta idea también plantea desafíos importantes: la recaudación fiscal es crucial para el funcionamiento del Estado y el financiamiento de servicios públicos esenciales como la salud y la educación. La eliminación del IVA para los autónomos podría dejar un agujero en el presupuesto público, lo que requeriría encontrar fuentes alternativas de ingresos o reducir el gasto en otros ámbitos.
Otro aspecto a considerar es la posible distorsión en la competencia entre autónomos y empresas. Si los autónomos quedaran exentos del IVA, las empresas podrían verse en desventaja competitiva, lo que podría tener un impacto negativo en la igualdad de condiciones en el mercado.
¿Qué dice la ley?
De aprobarse la ley, que entraría en vigor entre el 2025 y el 2027, España deberá eliminar esta obligación para los autónomos pero sólo para quienes facturen menos de 85.000 euros al año. Asimismo, la UE obliga a los países miembros a que la pongan en funcionamiento a partir del 1 de enero de 2025. De no hacerlo, serán sancionados.
De este modo, los autónomos tendrán dos opciones: adoptar el régimen general del IVA como lo hacen hasta ahora, o sumarse al régimen especial de franquicia del IVA. En este caso, no tendrían que incluir el impuesto en las facturas y, por tanto, no tendrían que declararlo.
Desde Valio Consulting te acompañamos en la decisión que quieras tomar como autónomo, teniendo en cuenta tus intereses y beneficiando siempre tu economía, entendiendo que los profesionales autónomos con pocos gastos asociados a su actividad serán los que mayormente se podrán beneficiar con la medida.